EL DIA DEL SEÑOR, ADIVINACION Y ORACULOS EN EL MUNDO ANTIGUO
EL DIA DEL SEÑOR
La expresión "el día del Señor" fue utilizado por los profetas para indicar el momento en que el actual estado de cosas sería sustituido por el nuevo orden del Señor. La mayoría de los oráculos de la literatura profética presentan un movimiento hacia esta condición ideal. Lo que esta claro es que en el desarrollo de la profecía este nuevo estado de cosas no se lograría a través de una intervención inmensa de Dios (aunque tal intervención puede estar involucrado en el último paso), sino a través del proceso de hacer frente a las desigualdades que se han convertido en una gran amenaza al fin deseado.
El resultado de esto es que puede haber numerosos "día del Señor" antes del día del Señor, que inaugurará un nuevo orden que nunca más volverá a estar en peligro o desestabilizado. De esta manera, el derrocamiento del Imperio Asirio se puede considerar como un día del Señor; Así también del mismo modo la caída de Babilonia. La destrucción de Jerusalén y el templo también califican como día del Señor, al igual que la campaña Josías para reformar el sacerdocio.
Por ejemplo, el Día de Señor se puede ver como la ocasión en que el Señor ascenderá a su trono con el fin de traer justicia vinculada al orden mundial. Los destinos de sus súbditos se determinará en que los justos serán recompensados y los malos sufrirán las consecuencias de su rebelión y el pecado.