COMENTARIO A LOS EFESIOS, 2:11-22

EFESIOS 2:11-22

RESUMEN:

1. En Efe 1:3-14, Pablo alaba a Dios por las grandes bendiciones espirituales que Él ha concedido a todo

    verdadero creyente, entre los cuales obviamente estaban los efesios.   

2. En Efe 1:15-23, Pablo ora a Dios, pidiendo que Él conceda a los efesios mayor entendimiento acerca de

    estas bendiciones espirituales.

3. En Efe 2:1-10, Pablo describe la vida de los efesios antes de experimentar estas bendiciones espirituales,

    y lo que Dios hizo en sus vidas para que comenzaran a gozar estas bendiciones espirituales.

En Efe 2:1-10, el ‚énfasis de Pablo está puesto sobre el aspecto INDIVIDUAL de la salvación; es decir, Dios salvó individualmente a los efesios, para que individualmente hagan buenas obras (v.10).

AHORA: Pablo pasa a hablar del aspecto social de estas bendiciones espirituales; es decir, de cómo estas bendiciones espirituales tienen ciertas consecuencias para la comunidad de la iglesia en Éfeso.

TRASFONDO: Aunque había judíos viviendo en Éfeso (Hch 18:19-21; 19:8), parece que la gran mayoría de los creyentes en Éfeso eran gentiles. En la Iglesia Apostólica, muchos problemas y tensiones surgieron entre los creyentes judíos y gentiles.    Por un lado, los judíos se jactaban de ser miembros del verdadero pueblo de Dios; mientras que por otro lado, los gentiles menospreciaban a los judíos.

La Iglesia en Éfeso no era la única que sufría estas tensiones (ver Romanos 15:7-9).     Sin embargo, quizá

había tensiones muy fuertes entre los judíos y gentiles en la Iglesia en Éfeso, y por eso Pablo trata el tema de la reconciliación.

El tema de estos versos es "La Reconciliación Efectuada por Cristo en la Cruz".

1. LA CONDICIÓN DE LOS GENTILES ANTES DE LA MUERTE DE CRISTO (Efe 2:11-12)

Pablo comienza esta sección describiendo cuál había sido la condición espiritual de los creyentes gentiles, antes de gozar la salvación en Cristo.     

NOTA: En Efe 1:1-3, Pablo había descrito la condición espiritual de los efesios en relación con el dominio

 de Satanás.  Ahora, él describe la condición espiritual de los efesios en relación con su aislamiento

 de Israel.  Pablo menciona varias cosas que eran ciertas de los efesios (gentiles) antes de conocer a Cristo:

                        a. Eran llamados la "incircuncisión" (v.11).

                        b. Estaban "sin Cristo" (v.12).

                        c. Estaban "alejados de la ciudadanía de Israel" (v.12).

                        d. Eran "ajenos a los pactos de la promesa" (v.12).

                        e. Estaban "sin esperanza" (v.12).

                        f. Estaban "sin Dios" (v.12).

¡Qué condición tan triste!

2. LA RECONCILIACION ENTRE JUDIOS Y GENTILES (Efe 2:13-18)

Cuando Dios llamó a Abram, Él prometió que todas las naciones de la tierra serían bendecidas por medio de él (Gén 12:3).    La pregunta era, ¿cómo se iba a realizar esto?

Para los judíos, la implicancia era que si las ‘naciones’ de los gentiles querían participar de las bendiciones de Dios, entonces tendrían que hacerse judíos. ¡Muchos judíos creyentes seguían pensando eso!

Sin embargo, en Gál 3:16 Pablo explica que la manera en que las naciones iban a ser bendecidas por Abram era por medio de Cristo.     Pablo amplía esta enseñanza en Efe 2:13-18.     Por lo tanto, si los gentiles querían gozar de las bendiciones de Dios, prometidas a Abram, ellos tenían que unirse, no a Israel sino a Cristo.

Veamos a continuación las bendiciones que los gentiles gozan por medio de Cristo y Su obra en la cruz, según Efe 2:13-18:

a. "habíais sido hechos cercanos por la sangre de Cristo" (v.13)

¿A qué‚ se refiere Pablo?  ¿‘Cercanos’ a Dios o ‘cercanos’ a los judíos?  Parece que él está  hablando de las dos cosas al mismo tiempo. El perdón de los pecados, por medio de la sangre de Cristo, nos permite acercarnos a Dios; y a la vez, nos permite acercamos a los hermanos en la fe (1 Juan 1:7).

b. "Él es nuestra paz" (v.14a)

Una vez más, esto se refiere tanto a la paz con Dios, como también a la paz con los judíos; todo por medio de la obra de Cristo. Ver también v.15, 17.

c. "de ambos pueblos hizo uno" (v.14b)

Es decir, la obra de Cristo en la cruz logró unificar a los judíos y gentiles.   Lo hizo, por medio de la creación de la Iglesia.  En ella, los judíos y gentiles que creen en Cristo, forman un sólo pueblo de Dios.    Los gentiles no tienen que volverse judíos, y los judíos no tienen que volverse gentiles; ambos tienen que volverse cristianos (comparar v.15-16).

d. "derribando la pared intermedia de separación" (v.14c)

La referencia aquí es al culto en el templo judío. En el templo en Jerusalén había un patio donde los gentiles podían entrar.  Más allá, al patio de los judíos, los gentiles no podían entrar. Había una gran pared que dividía estos dos patios, y avisos en la pared advertían que si algún gentil pasaba al patio judío, sufriría la pena de  muerte.    Cuando Cristo murió en la cruz, no sólo el velo del templo se rompió en dos (señalando la reconciliación entre Dios y los hombres), sino que la pared que separaba a los judíos y gentiles también se derribó (señalando la reconciliación entre ambos pueblos).

e. "aboliendo en su carne las enemistades..." (v.15)

Una de las cosas que más separaba a los judíos de los gentiles, era la ley de Moisés. Los gentiles no tenían esta ley, y miraban con desprecio a los judíos, quienes cumplían al pie de la letra leyes, que para los gentiles eran muy extrañas.    Por otro lado, la misma ley (o a lo menos, ¡la interpretación de la ley dada por los fariseos!) señalaba que los gentiles eran "inmundos", y que los judíos no debían tener ningún contacto con ellos (ver Juan 4:9; Hch. 11:1-3; Gál 2:11-12).    Todo esto produjo una tremenda enemistad entre judíos y gentiles. Lo que Pablo enseña es que la muerte de Cristo abolió estas enemistades provenientes de la ley de Moisés (v.15).

En resumen, con Su muerte en la cruz, Cristo logró romper las barreras que separaban a los judíos de los gentiles. En el Nuevo Pacto, la salvación es por gracia, y no tiene nada que ver con guardar la ley de Moisés.   Por lo tanto, la salvación es para todos. Esto tiene la consecuencia de poner a todo hombre al mismo nivel, rompiendo una vez para siempre las divisiones históricas entre judíos y gentiles.

3. LA DOCTRINA DE LA IGLESIA (Efe 2:19-22)

Al hablar de la reconciliación entre judíos y gentiles, Pablo ya está aludiendo a la doctrina de la Iglesia. Él ha hablado de la Iglesia como:

                       - un solo y nuevo pueblo (v.14).

                       - un solo y nuevo hombre (v.15).

                       - un solo y nuevo cuerpo (v.16).

Ahora, en v.19-22, Pablo trata en forma más formal la doctrina de la Iglesia.    ¿Qué es este nuevo "pueblo", este nuevo "hombre", este nuevo "cuerpo" que Dios ha creado por medio de Cristo?"   Pablo contesta:

a. Es la nueva familia de Dios (v.19)  

OJO: La nueva familia es integrada tanto por judíos como por gentiles. No es que los gentiles se han vuelto

           judíos; menos que los judíos se han vuelto gentiles.   Sino que, tanto judíos como gentiles han pasado

           a integrar la nueva familia de Dios.

b. La Iglesia está  fundamentada sobre "los apóstoles y profetas" (v.20)

Los "profetas" representan los líderes espirituales del Antiguo Pacto, mientras que los "apóstoles” representan los líderes espirituales del Nuevo Pacto. La Iglesia está fundamentada sobre ambos; y consiste en judíos y gentiles.

c. La Iglesia va Creciendo (v.21)

Cuando hay una buena coordinación entre los miembros, la Iglesia va a crecer grandemente (Pablo tratará este tema más ampliamente en Efe 4:12-16).

d. La Iglesia es el Templo del Espíritu Santo (v.22)

En el Antiguo Pacto, Dios habitó en el Templo en Jerusalén; un templo netamente judío. Pero ahora, Dios el Espíritu habita en la Iglesia, que es conformada tanto por judíos como por gentiles.

APLICACIÓN

¿Cómo podemos aplicar estas enseñanzas hoy en día?    Hoy no tenemos el problema de tensiones entre judíos y gentiles; pero si tenemos otras tensiones en las iglesias:

            - las tensiones entre los de la clase ‘alta’ y los de la clase ‘baja’.

            - las tensiones entre jóvenes y adultos.

            - las tensiones entre los ricos y los pobres.

            - las tensiones entre los hombres y las mujeres.

            - las tensiones entre ‘carismáticos’ y ‘no carismáticos’.

           

El plan de Dios es efectuar una reconciliación, tanto entre Dios y los hombres, como entre los hombres mismos (Efe 1:9-10). La tarea de la Iglesia es entender el propósito de Dios, y trabajar para que éste se cumpla.

Publicado con permiso de Alex Donnelly