jueves, 1 de marzo de 2012

COMENTARIO DE LA CARTA A LOS EFESIOS 1:2-23


Publicado con permiso Alex Donnelly


EFESIOS 1:3-23


Habiendo saludado a la Iglesia (v.2), Pablo ahora comienza el ‘cuerpo’ de la carta.     Podemos dividir los versos 3 al 23, en dos bloques:


1. PABLO ALABA A DIOS POR SUS BENDICIONES (v.3-14)

Pablo escribe esta carta desde la cárcel (Efe 3:1; 4:1).   Fácilmente podría haber comenzado la carta con una queja, o con una alusión a la lucha espiritual que estaba enfrentando en este momento.    Pero Pablo empieza con una nota de alabanza a Dios (v.3).

En los v.3-14, Pablo presenta una lista de las bendiciones espirituales que, en su totalidad, constituyen la salvación que Dios nos da.    Es interesante notar como cada una de las Personas de la Trinidad tienen un rol que jugar en nuestra salvación:





a. Las Bendiciones que Provienen de Dios el PADRE (v.3-6)

En primer lugar, Pablo dice que la fuente de toda bendición espiritual es Dios el Padre (v.3).    Luego, pasa a detallar ciertas bendiciones espirituales que vienen de Dios el Padre en forma específica:


i. Elección (v.4)

Pablo comienza alabando a Dios por la bendición de la elección divina.    Esta es una doctrina fuertemente discutida; sin embargo, parece ser la clara enseñanza de la Biblia (ver Marcos 13:20; Juan 15:16; 1 Cor 1:26-29; Sant 2:5; 1 Ped 1:1).

Como creyentes, quizá tengamos muchas preguntas en cuanto a esta doctrina.   Pablo no trata el tema profundamente; simplemente se limita a aclarar dos cosas importantes acerca de la elección de Dios:

     (1) El momento de la elección - "antes de la fundación del mundo".

     (2) El propósito de la elección - "para que fuésemos santos y sin mancha".

Es cierto que nosotros un día decidimos entregar nuestras vidas a Cristo, y seguirle a Él.     Lo que Pablo está diciendo aquí, es que detrás de nuestra decisión a favor de Cristo, está la elección eterna de Dios.

ii. Predestinación (v.5a)

La palabra "predestinación" simplemente significa que aun antes de nuestro nacimiento, Dios tuvo un propósito para nuestras vidas.  Nuestras vidas no son el simple producto de las circunstancias de la vida; menos de la "suerte".  La Biblia enseña que Dios nos ha creado según los planes que Él tuvo desde la eternidad (ver Sal 139:13-16; Jer 1:5; Gál 1:15).




iii. Adopción (v.5b)

El destino que Dios tiene preparado para cada uno de Sus ‘escogidos’, es hacerlos Sus hijos.     Aunque Dios nos ha creado, todos somos por naturaleza "hijos de Satanás" (Juan 8:44; Efe 2:3; 1 Juan 3:8-10).   En Su gracia, Dios adopta como Sus "hijos" a todos los que ponen su confianza en Cristo (Juan 1:12-13).      Él les da un nuevo "nacimiento", y les concede el privilegio de ser Sus hijos adoptivos (Rom 8:14-17).

¿Qué le motivó a Dios el Padre bendecirnos en esta manera?     Pablo menciona DOS cosas:

[1] "el puro afecto de Su voluntad" (v.5c).  

[2] "para alabanza de la gloria de Su gracia" (v.6).

En otras palabras, Dios no fue motivado a concedernos estas bendiciones porque Él vio algo bueno en nosotros. De haber sido así, la salvación no hubiera sido por gracia, sino por obras (ver Efe 2:7-9).

Nuestra salvación nació en el propio corazón de Dios, en la eternidad.    Este es un gran misterio, que quizá nunca podremos entender completamente; pero nos debe llevar a la adoración.


b. Las Bendiciones que Provienen de Dios el HIJO (v.7-12)

Habiendo hablado de las bendiciones espirituales que provienen de Dios el Padre, Pablo pasa ahora a hablar de las bendiciones que provienen del Hijo.


i. Redención (v.7a)

La palabra que Pablo usa en griego significa "rescatar a alguien, pagando un precio".  Se usaba, por ejemplo, de librar a esclavos.    Esto ocurría cuando una persona pudiente y caritativa, iba al mercado de Roma, donde se vendían los esclavos, compraba uno de ellos, y luego le concedía la libertad incondicional.
La Biblia enseña que todo ser humano es un esclavo del pecado y de Satanás. Para obtener nuestra liberación, Cristo tuvo que pagar el precio del ‘rescate’. Este precio fue muy alto - Su propia vida (Hch 20:28; 1 Ped 1:18,19).


ii. Perdón de Pecados (v.7b)

Habiendo comprado nuestra libertad, Cristo nos concede el perdón de nuestros pecados. Esto lo hace sobre la base de la sangre que Él derramó en la cruz (1 Juan 1:7,9).


iii. Revelación (v.9-10)

Uno de los privilegios de ser hijos de Dios, es que ahora podemos recibir revelación de Dios, para comprender el "misterio de Su voluntad" (v.9).    Ver Juan 15:15.

Cristo tiene muchas cosas que desea compartir con nosotros, pero lo más importante es Su plan de salvación (v.10).
          


iv. Herencia (v.11)

Uno de los grandes privilegios de ser adoptados hijos de Dios, es que llegamos a ser "herederos de Dios y coherederos con Cristo" (Rom 8:17).

Debemos notar el tiempo del verbo: "tuvimos herencia".     No es algo que queda solamente para el futuro; ya estamos gozando nuestra herencia (ver v.13-14).

Una vez más nos preguntamos, ¿por qué nos ha bendecido tanto Cristo?  La respuesta está en v.12a.


c. Las Bendiciones que Provienen de Dios el ESPÍRITU (v.13-14)

Del v.3 en adelante, Pablo está hablando de las bendiciones espirituales que el creyente goza de parte de Dios.     Pero el ser humano no es totalmente pasivo; hay cosas que tenemos que hacer para recibir estas bendiciones.    En v.13a, Pablo menciona dos cosas:

[1] Escuchar "la palabra de verdad".
[2] Creer en Cristo.

Habiendo hecho estas dos cosas (obviamente con la ayuda de Dios), estamos en condiciones de recibir las bendiciones del Espíritu Santo.  Pablo menciona dos:


i. Sellados (v.13)

El sello, en tiempos bíblicos, tenía dos funciones (ver Ester 8:8 y Mateo 27:66).     Dios el Padre concede al creyente la bendición del Espíritu Santo como garantía de su salvación.    Es el Espíritu Santo, morando en el creyente, que le da la seguridad de que es un verdadero hijo de Dios (Rom 8:16).


ii. Las Arras de la Herencia (v.14)

La palabra en griego, traducida "arras", (‘arabon’) significa "depósito".    Es la palabra que se usaba para hablar de la cuota inicial en la compra de algún artículo valioso.    Hoy en día, en el griego moderno, la palabra ‘arabon’, se usa del anillo de compromiso que el novio da a su novia, como evidencia de su compromiso que un día se casará con ella.

Lo que Pablo está diciendo es que el Espíritu Santo es ‘la cuota inicial’ de nuestra salvación; Él es el ‘aro de compromiso’ del creyente.     Dios tiene mucho más que darnos, como Sus hijos.    Por mientras, nos da Su Espíritu Santo, para morar en nosotros.     En la Segunda Venida, y por toda la eternidad, gozaremos de la plenitud de toda nuestra herencia, como hijos de Dios.


2. PABLO ORA A DIOS A FAVOR DE LOS EFESIOS (v.15-23)

Pablo sabe que simplemente hacer una lista de las bendiciones espirituales que tenemos de parte de Dios no es suficiente.    Por eso, pasa a orar por los efesios, para que ellos COMPRENDAN estas cosas.     En la oración de Pablo podemos notar dos elementos importantes:


a. Acción de Gracia (v.15, 16a)

Pablo es "educado" en su relación con Dios. No comienza con una lista de peticiones. Primero, comienza con acción de gracias. Este espíritu de agradecimiento es muy importante en nuestra comunión con Dios.
Pablo da gracias a Dios por la iglesia en Efeso, y por la vida espiritual de los creyentes en esa ciudad.      Pablo reconoce que ellos son el fruto de la obra de Dios, y por eso da gracias a Dios por lo que Él ha hecho en sus vidas.


b. Intercesión (v.16b-23)

Habiendo dado gracias a Dios, Pablo pasa a interceder por los creyentes en Efeso. Básicamente, Pablo pide a Dios DOS cosas a favor de ellos:


i. Comprensión del Evangelio (v.17, 18)

Para que el creyente pueda comprender todo lo que Dios ha hecho a su favor, y cuán precioso es el Señor Jesucristo, el creyente necesita la ayuda de Dios.    Necesitamos tener un "espíritu de sabiduría y de revelación" (v.17).


ii. Comprensión del Poder de Dios (v.19-23)

El cristianismo no es simplemente un cuerpo de doctrina que tenemos que aprender, sino es una vida que tenemos que vivir.  Para esto, el creyente necesita el poder de Dios.    Pablo pide a Dios que ayude a los efesios a entender cuán grande es Su poder, que actúa a favor de ellos, y que les ayude a vivir la vida cristiana.

No hay comentarios:

Publicar un comentario