martes, 28 de febrero de 2012

INTRODUCCION A LOS EFESIOS


INTRODUCCION A LA CARTA  A LOS EFESIOS


LA CIUDAD DE ÉFESO

Éfeso era una de las ciudades más importantes del mundo antiguo. Tres factores dieron lugar a su importancia:

[1] Era la capital de la provincia romana de "Asia".  Por ende, era el centro de actividades políticas.  

[2] Era un puerto marítimo.  Rutas comerciales conectaban la ciudad de Éfeso con el este del imperio
      romano.  Muchos productos pasaban por Éfeso, siendo cargadas en barcas, y llevadas hacia Roma
      y el oeste  del imperio.    Por ende, Éfeso era un gran centro comercial.

[3] Era también un centro religioso.  Un enorme y lujoso templo dominaba la vida religiosa de la
      ciudad.   La diosa que veneraban en este templo se llamaba Artemisa (en griego) o Diana (en latín).
      Gente venía de todas partes del mundo para visitar su templo.

Estudiosos dicen que en el tiempo de Pablo, Éfeso tenía una población de unos 250,000 habitantes.      Obviamente, era una ciudad clave en la cual establecer una iglesia.




EL ESTABLECIMIENTO DE LA IGLESIA EN ÉFESO


Hch 18:19-21 relata la primera visita de Pablo a esta gran ciudad, durante su segundo viaje misionero.     Pablo predicó en la sinagoga, y fue bien recibido (Hch 18:20).   Pablo estaba apurado por llegar a Jerusalén con una ofrenda para los santos, y por lo tanto no pudo quedar mucho tiempo en Éfeso; pero prometió volver luego (Hch 18:20).

Antes que Pablo pudiese regresar, otro predicador llegó a Éfeso; su nombre era APOLOS (Hch 18:24).     Lucas nos dice que Apolos era un hombre elocuente, y predicaba con fervor; pero no conocía bien el evangelio de Cristo (Hch 18:24-25).    Él predicó en la sinagoga, y fue orientado por Priscila y Aquila en cuanto al verdadero evangelio (Hch 18:26).   Posteriormente, Apolos continuó su gira evangelística (Hch 18:27-28).

Poco después, durante su tercer viaje misionero, Pablo cumplió su promesa de volver a Éfeso (Hch 19:1).    Al llegar a la ciudad, Pablo encontró un grupo de "discípulos"; estos hombres eran el fruto de la predicación de Apolos.  Pablo pudo discernir que algo faltaba en la vida espiritual de estos "discípulos", y les preguntó si habían recibido el Espíritu Santo cuando creyeron en Cristo (Hch 19:2).   La respuesta de estos hombres indicó que la falta de una predicación correcta y completa del evangelio por parte de Apolos, había resultado en discípulos defectuosos (Hch 19:3). Pablo les predicó un evangelio completo (Hch 19:4), y como consecuencia todos recibieron el Espíritu Santo (= fueron verdaderamente convertidos).    Así inició la Iglesia en Éfeso.

Hch 19:8-41 relata algo de la experiencia de Pablo en Éfeso, incluyendo los tremendos milagros hechos por Dios a través de Pablo (v.11-12), el intento por parte de los judíos de exorcizar a un hombre endemoniado (v.13-17), la destrucción de materiales relacionados con el ocultismo (v.18-19), y la persecución contra los creyentes (v.23-41).
Pablo pasó un total de tres años en Éfeso, estableciendo la Iglesia en la ciudad, fortificando la vida espiritual de los creyentes, y motivándoles a llevar el evangelio a los lugares aledaños.


 EL PROPÓSITO DE LA CARTA

La carta fue escrita por el apóstol Pablo (Efe 1:1), desde la cárcel en Roma (Efe 4:1; 6:20), alrededor de los años 61-62 d.C.  

Aunque Efe 1:1 indica que Pablo dirigió esta carta a la Iglesia en la ciudad de Éfeso, otros versos señalan que Pablo no conocía a todos los creyentes que iban a leer esta carta, o que a lo menos ellos no le conocían bien a él (ver Efe 1:15; 3:2). Por lo tanto, algunos estudiosos han dicho que "Efesios" fue una carta circular, enviada no sólo a la Iglesia en Éfeso, sino también a otras congregaciones en los lugares aledaños.

El propósito de la carta fue impartir enseñanza doctrinal y práctica; por ende, la carta está dividida en dos secciones:

[1] Sección Doctrinal (Efe 1-3).
[2] Sección Práctica (Efe 4-6).


EL CONTENIDO DE LA CARTA 

A continuación presentamos un bosquejo detallado de la carta a los Efesios:

      I. EL SALUDO (1:1,2)

    II. LA PARTE DOCTRINAL (1:3 - 3:21)

         1. La Obra de Dios en la Salvación del Hombre (1:3-14)

     a. La Obra de Dios el Padre (1:3-6).
     b. La Obra de Dios el Hijo (1:7-12).
     c. La Obra de Dios el Espíritu Santo (1:13-14).

         2. Revelación Espiritual (1:15-23)

                  a. La Necesidad de Revelación Espiritual (1:15-17).
                  b. El Contenido de la Revelación Espiritual (1:18-23).

         3. El Camino a la Salvación (2:1-10)

    a. La Condición del Hombre Pecador (2:1-3).
    b. La Obra de Dios en la Salvación del Hombre (2:4-7).
    c. El Rol de la Fe en la Salvación del Hombre (2:8-9).
    d. El Lugar de las Buenas Obras (2:10).

         4. La Reconciliación Efectuada por Cristo en la Cruz (2:11-22)

    a. La Condición de los Gentiles antes de la Muerte de Cristo (2:11-12).
                  b. La Reconciliación entre Judíos y Gentiles (2:13-18).
                  c. La Doctrina de la Iglesia (2:19-22).


         5. El Misterio del Evangelio (3:1-13)

     a. La Revelación del Misterio al Apóstol Pablo (3:1-5).
     b. El Contenido del Misterio (3:6-9).
     c. El Propósito de Dios (3:10-13).

         6. La Oración de Pablo (3:14-21)

            Pablo pide a Dios que ayude a los Efesios a entender la grandeza del amor de Dios y de Su
            salvación.


    III. LA PARTE PRÁCTICA (4:1 - 6:24)

         1. La Vida del Creyente en la Iglesia (4:1-16)

     a. La Importancia de la Unidad (4:1-6).
     b. La Importancia del Servicio (4:7-12).
     c. La Importancia del Crecimiento Espiritual (4:13-16).


         2. La Vida Pública del Creyente (4:17 - 5:20)

     a. Despojar el "Viejo Hombre" (4:17-22).
     b. Revestirse del "Nuevo Hombre" (4:23-32).
     c. Vivir Como Hijos de Dios (5:1-17).
     d. Estar Llenos del Espíritu Santo (5:18-20).


         3. La Vida Privada del Creyente (5:21 - 6:9)

         a. Esposas y Esposos (5:21-32).
     b. Hijos y Padres (6:1-4).
     c. Siervos y Amos (6:5-9).


         4. La Guerra Espiritual de la Iglesia (6:10-20)

     a. Los Enemigos de la Iglesia (6:10-12).
     b. La Armadura de Dios (6:13-17).
     c. La Importancia de la Oración (6:18).
     d. El Ejemplo de Pablo como Soldado (6:19-20).


     IV. CONCLUSIÓN (6:21-24)
Publicado con permiso de Alex Donnelly

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