No hay visión y ánimo para poder seguir
ministrándoles. Parece como si estuvieran predicándole a estatuas que no se
comunican.
Muchas veces los adolescentes hacen que
los líderes duden de estar en el lugar donde Dios quiere que estén. Veo
muchos líderes de jóvenes ciegos y frustrados por estos adolescentes. Si tú
eres una de estas personas que está batallando con el ministerio de
adolescentes, valdría la pena estudiar los siguientes puntos que espero te
ayuden con el desafío de trabajar con adolescentes.
Hay siete puntos que se requieren para
poder trabajar con los Adolescentes:
1.
Tienes que tener un llamado:
Muchas veces estamos como líderes porque
no había alguien más que pudiera llevar este título. Si no están en tu
corazón los adolescentes quizás no es el mejor lugar donde debes estar. Para
mí los adolescentes son mi pasión y mi carga. Quiero mucho a los jóvenes
menores de 18 años o mayores, y mi sueño es ver el ejército de adolescentes
que encuentro en (Ezequiel 37: 2-10) Yo veo a mis adolescentes como un
ejército poderoso y les profetizo que serán un ejército victorioso.
2.
Visión:
Tienes que escribir la visión, tener
metas para los adolescentes y vivir en la certeza de que se cumplirá la
visión aunque tarde un poco. (Habacuc 2: 2-3).
La visión y dirección son necesarias
para no perecer. (Prov. 11:14). Tienes que empapar a tus líderes de ella. Si
no les muestras el camino, ellos no podrán llegar a la meta. Tu iglesia tiene
que estar de acuerdo con la visión y orar por ella.
3.
Plan:
Cada guerra tiene una estrategia. ¿Cuál
será tu estrategia? (Prov. 24:1). No podemos ir a la guerra con las armas del
pasado, tenemos que usar armas actualizadas que puedan derribar a nuestro
enemigo del presente. Organizate, no seas una persona que llega a la reunión
sin preparación. Los adolescentes saben cuando te preparas o sólo les das
algo de última hora. Nuestras actividades tienen que llamarles la atención y
que sea algo que les ministre y les guste.
En la reunión sé original y no religioso
ellos quieren poder invitar a sus amigos no cristianos a la reunión, pero la
verdad es que les da pena por las cosas que les ofreces.
4.
Persistencia:
No te desesperes, ya que no a todos los
adolescentes les gusta trabajar. Dales palabras de aliento en lugar de
quejas. El tiempo llagará cuando ellos serán los líderes.¿ Cuánto oras por
ellos? Diles que ellos tienen mucho valor.
5.
Paciencia:
Tienes que entender que estás trabajando
con diferentes caracteres y que cada uno de tus adolescentes es un mundo
diferente. Ellos están pasando por una de las etapas más difíciles en la vida
y están experimentando muchos cambios hormonales y psicológicos.
Te dejo con una estadística: Si logras
que un adolescente se quede en la iglesia de la edad de 12 a 18 años, ellos
servirán al Señor. Mi meta en el ministerio que Dios me ha dado es de
mantenerlos aunque ellos no sean los más espirituales. Su tiempo llegará y el
Espíritu Santo los tomará y transformará. Lo he visto en muchos de mis
adolescentes.
6.
Espiritual:
Dales de comer carne y no sólo tiempos
de juegos. Los juegos son muy importantes para mis adolescentes, y les damos
juegos, pero la palabra proclamada adecuadamente a su nivel, para la
mentalidad de los adolescentes, nunca falta.
Inyéctales a Jesús como su único
ayudador en este tiempo difícil. Diles que él los entiende y los ama a pesar
de sus imperfecciones y fallas. Discipula y desarrolla líderes entre ellos.
Tus adolescentes nunca serán más espirituales que sus líderes. ¿Cuánto tiempo
pasas con el Señor y estudias la palabra?
7. Fe:
Ten la certeza de que Dios está contigo.
Cree en los cambios de cada uno de tus adolescentes. La fe sin obras es
muerta. Por ello, es importante pasar tiempo con ellos y conocerlos. Espera
lo mejor de tu grupo. Recuerda que Dios diariamente está perfeccionando la
buena obra que ha comenzado en tu vida y en la de cada uno de tus adolescentes.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario